Serán los próximos empleadores y proveedores de nuevos clientes.
Los nativos digitales traen consigo un nuevo código de comunicación y comportamiento que obliga a las empresas acelerar su transformación digital, así como adaptar distintas áreas de su negocio, proceso de adecuación necesario para comprender ese nuevo lenguaje que gradualmente impone la denominada generación “pdc”.
La generación «pdc» nacida después del boom del milenio, hace 13 o 15 años, trae consigo todo un nuevo código de comunicación, a grado tal que en breve será necesario acudir a versiones de diccionarios que traduzcan los términos utilizados por esos nativos digitales, conceptos que en un futuro cercano se convertirán en algo normal.
Las ventajas competitivas de 30 años atrás ya no son válidas y prepararse para la generación «pdc» es menos una elección y más una consecuencia, el riesgo de no hacerlo es que alguien más lo hará por usted. Cada vez que tenga dudas sobre ello, recuerde el ritual de ir al local de vídeos el domingo por la noche y tenga en cuenta que usted y su empresa no quieren ser netflixados (desaparecer), advirtió Mario Almeida, director de TOTVS Consulting.
En opinión del especialista el puente para que las empresas puedan cruzar esa travesía inevitable, serán las Tecnologías de la Información (TI) y la decisión de «cambiar, pero cambiar rápidamente», proceso que deben promover a través de la adopción de metodologías ágiles y la implementación de conceptos como Lean Startup, Canvas y Design Thinking, que las compañías deben soportar en una plataforma.
Para Almeida bajo este nuevo escenario no hay recetas mágicas salvadoras, lo que se requiere es que los negocios sean digitales y acordes al nuevo modelo mental de desarrollo de soluciones de la tecnología. Las premisas son procesos inteligentes y diseño de servicios aplicado a las áreas compatibles con la era de las API´s, como servicios disponibles a escala global y contratados por uso en la modalidad SaaS o PaaS.
Las preguntas que los propietarios de empresas deben plantearse ahora, de no asumir la transformación digital es ¿qué sucederá cuando descubra que en su área de Recursos Humanos, con profesionales que no checarán una tarjeta de llegada ni de salida, simplemente porque eso les parece una pérdida de tiempo?
¿Cómo le pagarán a una generación que gusta de utilizar una aplicación bancaria distinta a la que maneja la empresa?, ¿cómo su cliente encarará a un vendedor que no puede dar un descuento del 11 por ciento, porque el sistema sólo permite el 10 por ciento?, esto en el momento en el que ese proveedor estará implementando un sistema predictivo de entrega por drones y trabajando con tasas cercanas a cero por ciento en pérdidas o retrasos.
Como ejemplo, destacó que el «sol de la digitalización ilumina y quema a todos, sin distinción de tamaño de empresa ni sector. Piense cuánto tiempo tardaron 99 Taxis y Uber para aniquilar el negocio de los permisos municipales de taxis en San Pablo, Brasil, un proceso que no llevó ni 10 ni 5 años, ese movimiento tardó 18 meses como máximo».
C$T-EVP