Miles de víctimas en el mercado global.
Conforme pasa el tiempo, la popularidad de las apps y sitios de citas entre los internautas va en aumento; datos de GlobalWebindex calculan que para 2023, el número de personas que los utilicen será mayor a 328 millones a nivel mundial, una ventana de oportunidad para el cibercrímen que encuentra entre los usuarios del enamoramiento virtual la forma idónea de estafar y extorsionar para obtener jugosas ganancias.
“Tinder y Happn son las más populares, registrando más de 50 millones de usuarios cada una. En este contexto, así como el uso de estas aplicaciones se popularizó a nivel global, también hay un lado oscuro, que es el de las estafas y engaños que se dan a través de estos servicios; un fenómeno cada vez más habitual que cobra muchas víctimas”, alertó la firma especializada en seguridad informática, ESET.
Las estadísticas mundiales de estafa vía citas online muestran que en Australia durante 2017 se reportaron 3 mil 981 casos, lo que registró pérdidas por más de 24 millones de dólares australianos, mientras que en lo que va de este año hay 349 casos implicando pérdidas por más de un millón en la misma divisa, según la Australian Competition and Consumer Commision.
En el Reino Unido, la Oficina Nacional de Inteligencia de Fraude, informó que en 2017, cada tres horas se reportaba un caso de fraude relacionado a citas online, y en más recientemente Action Fraud reveló que en 2018 se presentaron más de 4 mil 500 denuncias por fraudes de romances en línea, el 63 por ciento de las víctimas fueron mujeres, según la BBC.
En Estados Unidos, se destacó el caso de un hombre que fue víctima de estafa, después de mandar fotografías suyas, recibió un mensaje de un hombre que aseguraba ser el padre de una menor de edad y le amenazó con presentar cargos en su contra por el envío de imágenes, a menos que le enviara dos tarjetas prepagadas por 300 dólares; la intervención de la policía permitió detectar que se trataba de un engaño.
Latinoamérica no es ajena a estos delitos, en Argentina un individuo intentó estafar por medio de Tinder; una vez que se ganaba la confianza de la víctima y obtenía su número telefónico buscó comunicarse fuera de la app para decir que había enviado un regalo costoso, pero que fue retenido en aduanas y debía pagar 2 mil dólares para liberarlo, pedía apoyo de una transferencia y prometía devolver el dinero en su primer encuentro físico.
Existen diferentes modalidades de cómo los cibercriminales engañan a sus víctimas; estudian sus perfiles e información personal, encuentran datos de su actividad laboral, nivel de ingresos y estilo de vida; todo ello facilitado -desafortunadamente-, por una sobre exposición de las propias víctimas en sus redes sociales, así como por una gestión inadecuada de sus datos confidenciales que permiten construir un perfil bastante detallado de su perfil como usuario.
Los criminales, pueden usar la manipulación emocional, la sextorsión o el catfhishing, prácticas que desembocan en la exigencia de dinero a las víctimas, a cambio a veces de regalos o en casos extremos a cambio de fotos o videos íntimos, los cuales son usados para chantajearlos. El catfhishing, consiste en crear un perfil falso cuyo objetivo es comprometer a la víctima de alguna manera o simplemente molestarla.
En lo que respecta a la aceptación que tienen las aplicaciones y sitios de citas en América Latina y la región Asia-Pacífico, GlobalWebindex precisa que oscila entre 45 y 46 por ciento respectivamente, mientras que en Estados Unidos y Europa disminuye a 28 y 29 por ciento, en cada caso. Cabe resaltar que en Estados Unidos el 30 por ciento de los usuarios de Internet que las utiliza, tiene entre 18 y 29 años.
“Se recomienda tener presente que la posibilidad de ser víctima de un engaño es real y que a cualquiera puede sucederle. Al aceptar que podemos convertirnos en una víctima estaremos más atentos y seremos capaces de reconocer a tiempo ciertas señales que podrían alertarnos de que algo sospechoso puede estar ocurriendo. La educación y la concientización son pasos claves para poder disfrutar del Internet de manera segura”, precisó Camilo Gutiérrez, Jefe del Laboratorio de Investigación de ESET Latinoamérica.
Los expertos de la compañía recomiendan estar alerta cuando alguien solicite chatear fuera de la app o el sitio y sobre todo si comienzan a expresar sentimientos muy profundos a pocos días de entablar una conversación; sospechar de las inconsistencias que cuenta una persona y lo que se ve en sus redes sociales; evitar enviar dinero a desconocidos.
Es importante no compartir información, fotos o videos que puedan ser comprometedores con la persona que se está conociendo; también corroborar la autenticidad de las fotografías que se reciban por medio de Google Images o TinEye, de esta forma se puede saber si la persona en cuestión las tomó de internet o realmente son suyas; y si se llega a dar el paso de un encuentro personal, avisarle a un familiar o conocido para tener ayuda de ser necesario.
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