Presenta Alestra portafolio de soluciones.
En la nueva normalidad, impuesta por la pandemia de COVID-19, tecnologías como la Inteligencia Artificial y el Internet de las Cosas (IoT) serán parte de usos y costumbres que el mundo adoptará para reducir al máximo la aglomeración de personas y el contacto con objetos físicos que permitan garantizar una prioridad: la salud de las personas.
Si bien durante el primer trimestre del año, cuando la propagación del coronavirus encendió las alertas, las empresas identificaron la necesidad inmediata de adoptar herramientas tecnológicas de comunicación para establecer trabajo a distancia, para el periodo abril-junio, el foco del sector empresarial se colocó en sostener la productividad y eficiencia operacional.
A más de 130 días de confinamiento, las empresas se encuentran ya en un proceso de resiliencia que las lleva a visualizar inversiones inevitablemente relacionadas con una nueva realidad marcada por la sana distancia, el uso de cubrebocas y la reducción de presencia física de personas en espacios cerrados.
“El COVID-19 en México sirvió para que algunas empresas implementaran su transformación digital a pasos agigantados, esto las llevó a hacer en sólo tres meses, lo que les hubiera tomado tres años… Es un cambio que llegó para quedarse”, refirió Gabriel Muñoz, director de Estrategia de Producto de Alestra.
En el nuevo contexto, puntualiza el directivo, mantener la salud y la seguridad física de las personas dentro y fuera de los ambientes de trabajo es una prioridad que Alestra enfrenta con el nuevo portafolio de soluciones.
“El portafolio de protección busca garantizar que las personas que entran a los corporativos, plantas de manufactura, centros de distribución y oficinas, estén sanas y que tienen una temperatura adecuada, para ello ofrecemos una solución que combina tecnologías como cámaras termográficas conectadas a una plataforma de Inteligencia Artificial e Internet de las Cosas”.
La oferta tecnológica de Alestra también integra una solución tecnológica de acceso biométrico sin contacto que sin necesidad de analizar las huellas digitales y con sólo leer el flujo sanguíneo, es posible saber si una persona debe tener o no acceso a un lugar.
“Otra de las necesidades de los clientes es reducir el flujo de personas a sucursales, porque por ejemplo, muchas personas sólo van para mostrar una identificación con firma autógrafa, por ello, tenemos una solución de firma digital avanzada para que las personas no tengan que desplazarse y de manera digital puedan tomar una foto a su INE que se confirma a través de un algoritmo de IA”.
De acuerdo con una encuesta reciente de IDC, el 76 por ciento de las empresas reconocen que derivado de la pandemia aún enfrentan una situación compleja en términos económicos y continuidad del negocio, 38 por ciento está en crisis, 23 por ciento en desaceleración y 15 por ciento en recesión.
“La buena noticia es que cuando a estas mismas personas se les pregunta cómo te ves en tres meses, 54 por ciento se siente positivo, que tiene una visión y que está tomando decisiones que lo pueden llevar a un modo de recuperación”, refirió Gabriel Muñoz.
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