Plataformas digitales impulsan independencia femenina.
La economía gig, que junto con la robotización constituye una de las mayores disrupciones en el mercado laboral, presenta un panorama tan positivo como desafiante para la población femenina en términos de oportunidades económicas, desarrollo personal y profesional.
Las oportunidades laborales que conforman este ecosistema disminuyen las barreras de entrada y permanencia en sectores típicamente masculinos. Datos del BID indican que, por ejemplo, para las mujeres que quieren conducir para obtener ingresos, el registro a plataformas digitales es mucho más fácil y menos intimidante que pasar por el proceso de reclutamiento en un operador de taxi tradicional.
Además, las plataformas digitales pueden fortalecer la independencia económica de las mujeres, ya que posibilitan el acceso a una gama más amplia de clientes y ahorran gastos de marketing y ventas.
Sin embargo, estas tecnologías también pueden replicar las brechas de género observadas en el mercado de trabajo tradicional, como las de participación, salario y la segregación ocupacional.
C$T-GM