Para 2024, 45% de la población mundial se conectará a 5G
La falta de uniformidad normativa, restricciones de uso de terrenos o zonas especiales que dificultan la instalación de infraestructura, diferentes tasas de impuestos por tecnología o espectro ligado a tecnologías específicas y una carencia de normativas de exposición a radiación no ionizante, son algunas de las barreras que desaceleran el despliegue de redes 5G en América Latina.
De acuerdo con el primer reporte “Obstáculos del despliegue de redes móviles densas” de la consultora inglesa Webb Search, la estructura federal en diversos países de la región ha creado obstáculos sustanciales.
“El alto nivel de autonomía de las autoridades locales y regionales ha derivado en algunas normativas que obstaculizan el despliegue de infraestructura, lo que resulta en barreras para emprender labores de construcción, obtener permisos de uso de terrenos o derechos de paso para el despliegue de red.
El estudio patrocinado por Ericsson, detalla que en América Latina existen múltiples solicitudes de información por parte de diversos organismos, así como falta de uniformidad en las normativas. Asimismo, se advierte una carencia de procesos definidos, cronogramas, certeza jurídica y continuidad de políticas públicas tomadas con anterioridad.
El reporte señaló además la existencia de restricciones de uso de terrenos o zonas especiales que dificulta la instalación de infraestructura. Otra barrera es la de uso de suelo en áreas rurales o destinadas a preservación natural.
“A nivel tecnológico, Latinoamérica enfrenta retos por las diferentes tasas de impuestos por tecnología o espectro ligado a tecnologías específicas. Entre los hallazgos, también destaca el cobro duplicado de cuotas y licencias”.
Asimismo, se observa una carencia de normativas de exposición a radiación no ionizante, así como múltiples solicitudes de estudios de impacto para los diversos organismos locales. Otro inconveniente es que las normativas federales y locales son, a menudo, contradictorias entre sí.
“El fortalecimiento de la infraestructura y el fomento a la inversión pueden traducirse como dos de los grandes retos para Latinoamérica, que es una de las regiones con menos emplazamientos por cada 10 mil personas”.
La consultora destaca que una lección clave para impulsar el desarrollo de infraestructura en la región, entre las propuestas que detalla en informe, es unificar las prácticas normativas en todos los municipios, lo que crearía incentivos para la inversión y generaría altos niveles de cumplimiento voluntario.
Por su parte, Ericsson estima que hacia el año 2024 América Latina tendrá 7.0 por ciento de dispositivos conectados, mientras que el tráfico de datos en la región se multiplicará seis veces en los próximos cinco años.
La firma también pronostica que para 2024, alrededor del 45 por ciento de la población mundial estaría conectada al 5G, con lo que habría un total de mil 900 millones de personas conectadas a estas redes móviles, un incremento de casi 27 por ciento frente a las estimaciones de la compañía el año pasado.
C$T-GM