Visión socio-cultural es fundamental: Amedi.
La convocatoria y examen para seleccionar a los integrantes del Pleno del IFT tienen un sesgo en los perfiles profesionales que ha impactado en decisiones y resoluciones, por lo que además de privilegiar el conocimiento en áreas como la abogacía, economía e ingeniería, es fundamental incorporar la visión social, cultural, psicológica y de comunicación que exige el nuevo entorno digital.
“Lo social, lo cultural e incluso lo psicológico del inmenso y cada vez más abrumador sector digital y de las TIC han hecho que la regulación económica, el derecho de las telecomunicaciones y el diseño de redes de telecomunicaciones tradicionales no tengan respuestas amplias y adecuadas a los nuevos hábitos de consumo de las audiencias y los usuarios digitales”, enfatizó la Amedi.
Asimismo, la regulación no siempre sabe cómo enfrentarse a nuevas empresas de Internet, digitales, modelos de negocio y consolidaciones inéditas y se mantiene a la zaga, retrasada o incluso obsoleta con respecto al avance tecnológico, así como los nuevos y cambiantes hábitos digitales.
“En este momento del siglo XXI, se requieren reguladores paritarios, incluyentes, diversos e interdisciplinarios, con una mirada técnica, jurídica y económica, pero también de otras ciencias y disciplinas como la comunicación, que puedan dialogar, enriquecer las deliberaciones y enfrentar juntos los enormes desafíos de la radiodifusión, las telecomunicaciones y el mundo digital”.
En opinión de la Amedi, los marcos legislativos y regulatorios actuales, así como los diseños institucionales, no están preparados para enfrentar las implicaciones económicas, jurídicas y técnicas, pero tampoco sociales, culturales y emocionales, de nuevas tecnologías como la Inteligencia Artificial, la robótica y la automatización que genera la analítica de grandes datos, el Blockchain e incluso la ciberseguridad.
Las y los aspirantes al Pleno del IFT que acrediten los requisitos de la convocatoria emitida por el Comité de Evaluación deben realizar por ley un examen de conocimientos generales cuyo contenido sólo contempla temas de las áreas de derecho, economía e ingeniería.
Ello, como si la radiodifusión, las telecomunicaciones y todo el universo de Internet no tuvieran relación con aspectos sociales, de comunicación, cultura, antropología o psicología, por mencionar algunas áreas de evidente relevancia e impacto en dichos sectores, destaca la Asociación Mexicana de Derecho a la Información (Amedi).
Desde que se estableció el procedimiento para seleccionar a quienes aspiren a ser comisionado o comisionada del IFT, el Comité de Evaluación sólo ha privilegiado los perfiles antes mencionados, a pesar de que el IFT regula el amplio sector de las comunicaciones en el país, ninguno de los comisionados y comisionadas ha tenido un perfil disciplinar de la Comunicación.
“Son precisamente los aspectos sociales del uso, consumo y apropiación de las TIC, la radiodifusión, las telecomunicaciones y el ecosistema digital los que han transformado los modelos de negocio, los diseños institucionales, la regulación y los hábitos de consumo”.
El enfoque del examen general de conocimientos del Comité de Evaluación responde a una configuración tradicional del regulador, pero actualmente resulta discriminatorio y no fomenta la máxima concurrencia de participantes y tampoco contribuye para que el regulador en la materia desempeñe un mejor y más integral trabajo.
“No ampliar los derechos de las audiencias, autorizar concesiones a asociaciones civiles de pensamiento religioso o litigar competencias institucionales en materia de fusiones de empresas digitales, es resultado de miradas estrechas que sólo ponderan lo técnico, lo económico o lo legal, pero soslayan lo social y lo cultural”.
Cada minuto en Internet ocurren infinidad de interacciones comunicacionales que tienen que ver con gustos colectivos e individuales, y satisfacen no sólo necesidades de comunicación sino de entretenimiento, emocionales e incluso eróticas; sin embargo, en opinión de la Amedi nada de eso está siendo analizado por el regulador sectorial.
C$T-GM