Fundamental definir programas «de lo local hacia arriba».
En México, es necesario contar con un “mapa de desconectividad” de servicios de telecomunicaciones que identifique quiénes son los excluidos digitales, dónde están y por qué no han tenido la oportunidad de gozar de los beneficios que trae consigo el nuevo escenario tecnológico, coincidieron expertos del sector de telecomunicaciones y radiodifusión del país.
En el contexto del Foro Conecta México 2019, Adriana Labardini, abogada especializada en telecomunicaciones y radiodifusión, afirmó que tanto en el país como a nivel América Latina, se carece de información capilar, precisa y actualizada sobre el número de personas que no están conectadas, y por lo tanto se encuentran alejadas de los beneficios que trae consigo la tecnología.
La experta e integrante de la organización Conectadas destacó que, en la actualidad, “se habla de los aumentos de penetración, de usuarios, pero se necesita otro mapa: un mapa de desconectividad rural y urbana; se tienen estadísticas por país, pero hay que saber dónde están los desconectados y por qué”.
Labardini Inzunza señaló además la necesidad de diferenciar las estrategias dirigidas a la conectividad rural y urbana, pues no es posible evaluar estos dos ámbitos con los mismos parámetros. «Hay que mirar y plantear programas desde lo local hacia arriba”.
En su opinión hay mucho por revisar como, por ejemplo, la asignación y uso del espectro radioeléctrico debido a que hay frecuencias como las destinadas al servicio de microondas que ya no se usan para ese fin y se podrían utilizar de otra forma; además de plantear la posibilidad de que se liciten más hilos de fibra óptica de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
“Es la combinación de modelos híbridos, Asociaciones Público-Privadas, con modelos de acceso y eliminar cargas onerosas a operadores comerciales. Dar oportunidad a las comunidades de auto conectarse. Cualquier programa que sea del Estado, como proveedor de servicios o insumos, sino no son sostenibles a largo plazo y si no hay una planeación no van a ser exitosos”, advirtió.
Por su parte, Edgar Olvera, ex subsecretario de Comunicaciones de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) reconoció: “No hemos hecho (el trabajo) o lo hemos hecho mal: identificar a los desconectados, para llegar a ellos se necesita infraestructura, de todo tipo”.
En su participación, Javier Salgado, director de Altán Redes, empresa que opera la Red Compartida, dijo: “Debería haber no sólo un registro de infraestructura de telecomunicaciones, sino también tener claridad sobre quiénes son y dónde están los excluidos digitales”.
En el IFT se trabaja para que, partir de este año, los operadores del sector de telecomunicaciones y radiodifusión cuenten con una herramienta fundamental para generar acuerdos de compartición y que además pueda contribuir en la estrategia de negocios de las empresas al momento de desplegar infraestructura: el Sistema Nacional de Información de Infraestructura (SNII).
El SNII representa uno de los proyectos más importantes para la industria, pues habrá de obtener información sensible y hasta estratégica de los operadores, pues su objetivo principal será reducir costos, así como la escala de tiempo de construcción para el despliegue de redes de nueva generación, a través de la explotación de la infraestructura preexistente y con ello reducir la brecha de cobertura y de servicio.
En su oportunidad, Abel Hibert, subjefe de la oficina de Análisis e Innovación de la Presidencia destacó que es necesario complementar la infraestructura existente y generar condiciones para que siga siendo rentable el aumento de cobertura.
C$T-GM