Necesario diseñar hojas de ruta de mediano y largo plazo
En la actualidad y de cara a un futuro cercano más digital, tanto económico como social, el espectro es lo análogo a las vías ferroviarias del siglo XIX o las carreteras del siglo XX; sin embargo, al mes de abril de 2019 ninguno de los mercados latinoamericanos había alcanzado el 50 por ciento de la sugerencia de espectro de 1300 MHz para 2015 emitida por la UIT.
En el estudio “Análisis de las Recomendaciones de Espectro de la UIT en América Latina”, 5G Americas señaló que la falta de planeación de mediano y largo plazo para la asignación de espectro suficiente, limita el crecimiento de la industria de las telecomunicaciones y con ello se dinamitan los puentes hacia una sociedad digital, hacia el desarrollo de la economía y la transformación digital empresarial.
El promedio regional de espectro licenciado para servicios móviles equivale sólo a 29.2 por ciento de la sugerencia de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (ITU) de mil 300 MHz para 2015. De los mercados analizados en el reporte, ocho cumplen o superan la marca del 30 por ciento de la sugerencia:
Argentina (30.8 por ciento), Brasil (46.8 por ciento), Chile (37.7 por ciento), Costa Rica (30.8 por ciento), México (43.9 por ciento, Nicaragua (32.3 por ciento), Perú (42.6 por ciento) y Uruguay (30.4 por ciento).
El impacto de la conectividad en la esfera económica y social de los países ha sido documentado en diversos estudios; por ejemplo, en 2010 la Comisión de Banda Ancha identificó que por cada aumento de 10 puntos porcentuales en la penetración de banda ancha, el PIB de un país se incrementa 1.0 por ciento.
“Los reguladores de América Latina deben comprender la importancia de diseñar hojas de ruta de medio y largo plazo para adjudicar la cantidad de espectro adecuada para lograr una mayor conectividad en los países”.
5G Americas destaca que pese a la realidad macroeconómica de varios mercados latinoamericanos y un contexto global que aún no termina de recuperarse de la crisis financiera mundial de 2008, el otorgamiento de espectro radioeléctrico debe proseguir en América Latina como una necesidad imperante, tanto para el desarrollo económico de los países como para suplir las necesidades de una sociedad cada día más digital.
“El escenario de la región puede verse afectado también por las subastas multimillonarias que varios mercados centrales realizan en torno a espectro para 5G. En este escenario, es posible pero no deseable que tenga lugar un aplazamiento de licencias para nuevo espectro radioeléctrico”.
En este contexto, los gobiernos tratan de evitar inconvenientes como ofertas más bajas que las esperadas o ausencia de postores en el proceso, pues los intereses que se conjugan en el proceso de planificación y ejecución de una licitación son variados.
En ocasiones, a las dudas de los gobiernos se suma a la falta de visibilidad de los operadores para planear inversiones de medio y largo plazo por lo que prefieren destinar las inversiones realizadas en tecnologías e infraestructuras actualmente en uso.
El reporte de 5G Americas señala que existen alrededor de 7 mil 092 MHz de capacidad potencial de espectro que puede ser asignada en la región en licitaciones y subastas pautadas para 2019-2020, concursos donde se contemplan bandas que pueden poner los “cimientos” de 5G en la región como 600 MHz, 2.5 GHz, 3.5 GHz, 26 GHz y 28 GHz.
“El reto de estos nuevos procesos es el de asignar capacidad para mantener el desarrollo de 4G y 5G, pero también de encontrar nuevos mecanismos que permitan reducir la brecha digital”.
C$T-GM