Nuevas tecnologías vehículo de desarrollo.
Tecnologías como Inteligencia Artificial, Internet de las Cosas (IoT) y blockchain ayudan a romper las barreras en las diversas fases de la producción agrícola mexicana, con mejor comunicación, geolocalización, monitoreo de cultivos, lo que contribuye a encaminarse a una agricultura de precisión, tendencia global que aprovecha la innovación para aumentar la producción y calidad que exige un mercado competitivo.
“El IoT es la gran oportunidad para la agroindustria; en Estados Unidos hemos ayudado a controlar el agua en los sistemas de riego y en México estamos explorando un montón de oportunidades”, afirmó Mauricio Razo, vicepresidente y director General de la Región Noroeste en AT&T.
En el panel virtual “Tecnología e innovación en el campo mexicano”, dijo que estar cerca de la frontera con la Unión Americana impone ciertos retos en cuestión tecnológica, para ser competitivos en costos, precisión y calidad del mercado. Hablar de calidad implica tomar en cuenta el periodo de maduración de las cosechas, de cortar y entregar en el momento correcto, a un nivel de primer mundo.
“Hoy en día, sobre todo al campo exportador le está interesando muchísimo implementar el IoT, pero todavía estamos en una etapa de crecimiento, maduración; veo mucho interés pero mucha precaución en la toma de decisiones para hacer los proyectos de una forma completa y correcta”.
En ese sentido, opinó que para acelerar el proceso, con un beneficio generalizado, se necesita un mayor acercamiento directo con los agricultores para entender su problemática específica, si es por cuestiones logísticas, del monitoreo de agua, cantidad o calidad de la misma.
Alberto David, director general de Ubiqo, expuso el caso de esta empresa dedicada al desarrollo de soluciones de software y hardware para eficientar los traslados de productos tanto en territorio nacional como hacia los mercados de Estados Unidos y Canadá, donde algunos clientes piden el uso de blockchain para el monitoreo de los productos.
A través de esta tecnología, refirió, es posible evitar problemas como el que representa la corrupción, hacer más eficiente el pago y sobre todo hacer responsable a la línea de transporte de las anomalías que pudieran suceder durante el traslado.
Con dispositivos y una red se rompen barreras. A través de la red de AT&T se puede dar seguimiento sin costos de roaming para envíos que llegan a Canadá. El tipo de red permite que con bajos consumos de energía se tenga envíos de información, respecto a la ubicación del producto; de telemetría, de las condiciones de traslado, la temperatura y humedad, por ejemplo.
Ante el problema que representa para la geolocalización de mercancía, el hecho de que la batería de los testigos de carga no alcanza en caso de que un traslado dure más de tres meses, Ubiqo desarrolló un producto que puede dar hasta seis meses de autonomía, un dispositivo compacto denominado “stack”, diseñado para cajas de tráiler, que puede tomar la forma que el usuario quiera, como un aguacate o una papaya.
Otro caso en el uso de redes y tecnología es el que se genera en acciones sociales como el rescate de Chinampas, en Xochimilco. Al respecto, Antonio Murad, director de Finanzas y Mercadotecnia de Yolcan México, reconoció que el primer problema al que se enfrentó fue el de comunicación.
«Hemos tratado de hacer el esfuerzo por coordinar a los productores para establecer un calendario por temporada para cultivos tanto en Xochimilco como en Hidalgo, Puebla y el Estado de México, y poderlos vender a un precio justo; luego, las relaciones con restaurantes para diseñar juntos un menú, para el cual garantizan la compra de un cierto volumen semanal».
Esto se trata de comunicar al consumidor final, los restaurantes y a las personas que compran las canastas, para impulsar el consumo local. La información es importante para tomar decisiones sobre la marcha que al final reducen pérdidas, y que eficientan la producción, aseguró.
Aunque se habla de tecnología para exportación, en este caso se trata de un consumo local, explicó, y lo que hace Yolcan es enviar técnicos supervisores a checar la producción y son ellos quienes alimentan la base de datos.
“Tristemente no tenemos automatizada esa parte, porque nos hemos enfocado mucho en el mercado local, es producción local y consumo local. Costos de producción que sólo pagarían clientes en el extranjero, hemos tenido que buscar la manera de ver cómo lo sacamos adelante sin que sea tan costoso. Ahí es donde por suerte hemos tenido apoyo de aliados como el Foundry AT&T”, reconoció.
Afirmó que aunque es importante que las autoridades apoyen al campo con políticas públicas, en su opinión el consumidor es el que debe estar más activo, más involucrado con su comunidad.
C$T-GM