AT&T monitorea desarrollo de Red Compartida.
La red LTE-M de AT&T México, que ya está lista para soportar soluciones de Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en inglés), será pieza fundamental para el desarrollo de Ciudades Inteligentes en las que el uso de las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) son un elemento clave para el mejoramiento de los espacios y el uso eficiente de los recursos.
«Las Ciudades Inteligentes se apoyan del IoT para transformar la infraestructura y los espacios públicos, dando a las comunidades herramientas para optimizar servicios y lograr ahorros y beneficios para los ciudadanos», destacó Carlos Sánchez, CTO de AT&T en México.
En entrevista con Con$umotic, ejemplificó como las conexiones entre dispositivos personales como teléfonos inteligentes y wearables, y activos de la ciudad (como sistemas eléctricos, alarmas de seguridad, gestión de activos y semáforos, entre otros), pueden facilitar la vida en las zonas urbanas.
«En AT&T estamos trabajando para conectar a los ciudadanos con sus comunidades, nos apoyamos de nuestros recursos y experiencia en IoT para crear soluciones innovadoras para las ciudades».
El directivo refirió que en Estados Unidos la empresa ya comenzó a aplicar este concepto al conectar medidores de suministros públicos, semáforos y sistemas de agua, en ciudades como Atlanta, Chicago, Dallas y Portland; lo cual puede ayudar a transformar la manera en la que se usa la energía y se cuidan los recursos naturales.
En diciembre pasado, AT&T anunció que concluyó con las actualizaciones al software de red, necesarias para respaldar el despliegue de su red LTE-M en México, luego de realizar pruebas piloto en Tijuana y Puebla.
En agosto de 2017 la firma realizó exitosamente la primera sesión internacional de transferencia de datos en la red LTE-M entre Estados Unidos y México, lo que se estima fue la primera actividad de su tipo a nivel mundial.
«Hemos continuado trabajando y gracias a los esfuerzos de nuestro equipo de ingeniería, la red LTE-M ya está lista para soportar soluciones de IoT, y ofrecerle a nuestros clientes beneficios como módulos más pequeños, costos más bajos, vida de batería más larga y mejor cobertura dentro de los edificios».
El despliegue de esta infraestructura se sumó a la red LTE-M de AT&T en Estados Unidos, creando un área de cobertura para Norteamérica, lo que permite a empresas que tienen actividades en ambos países contratar alguna solución de IoT con la empresa y con ello mantener un mejor control de sus servicios o mercancía.
Por ejemplo, explicó el directivo de la firma en México, una empresa de logística podría conocer casi en tiempo real la ubicación de los vehículos que conforman su flotilla y saber qué ruta están tomando.
A pregunta expresa sobre el interés que AT&T México pudiera tener sobre la Red Compartida y si puediera eventualmente convertirse en cliente de esta infraestructura de telecomunicaciones, el directivo afirmó que la priordidad de la firma continúa siendo el despliegue de su red de próxima generación.
«AT&T reconoce el esfuerzo del gobierno mexicano por alcanzar una competencia efectiva. Nuestra prioridad como empresa continúa siendo el despliegue de una red de próxima generación que contempla una inversión de 3 mil millones de dólares. Continuaremos monitoreando el proyecto de la Red Compartida conforme avanzan nuestros planes».
C$T-GM