Superan visitas a sitios ilegales que a los legales en México.
Incentivar plataformas a participar contra la piratería, facilitar lo que el consumidor quiere, además de educación, regulaciones, verificaciones y cooperación internacional, son algunas de las propuestas para combatir el mercado ilegal de contenidos audiovisuales en América Latina, donde se realizaron al menos 15.6 mil millones de visitas a sitios ilegales en 2019 provocando cuantiosas pérdidas al mercado legal.
El crecimiento potencial de usuarios y la disponibilidad de la piratería en América Latina hacen que la región sea un foco de atención con relación a los problemas de protección de contenido, por lo que el llamado de los especialistas es a sumar esfuerzos generar mejores regulaciones, y educar a los consumidores.
De acuerdo con el reporte «Dimensión e impacto de la Piratería online de contenidos audiovisuales en América Latina», realizado por la consultora Ether City, por requerimiento del Centro de Estudios de Telecomunicaciones de América Latina (cet.la), esta actividad ilícita provoca pérdidas potenciales de 733 millones de dólares al año, al mercado legal.
Ello, contando únicamente a usuarios que no están suscritos a los servicios OTT más importantes; en tanto que para el mercado ilegal representa una potencial ganancia de 675 de millones de dólares, con base en los “clics” promedio en sitios ilegales en internet, donde se puede encontrar fácilmente contenido ilegal con alta disponibilidad a través de cinco fuentes: motores de búsqueda, plataformas sociales, dominios institucionales, dominios no esperados mercados y en grupos móviles.
“Si se hace una búsqueda con palabras clave como “torrent”, “ver películas gratis” o “IPTV” en YouTube, Twitter y Facebook, con seguridad aparecerán, entre los primeros 10 resultados, publicaciones y grupos que enseñan cómo consumir desde la piratería, dirigirse a sitios pirata o habilitar el consumo de contenido ilegal”.
Los sitios pirata usan diversas tácticas para mantener su relevancia en los motores de búsqueda y llenar vacíos que dejan las tácticas de protección de contenido, como las acciones de notificación y baja.
En México existe una descarga de aplicaciones móviles ilegales por cada 3.7 legales, y 984 millones de visitas fueron generadas por los 100 dominios ilegales más importantes. De ellos el 82 por ciento es streaming, 13 por ciento de torrent y 5.0 por ciento de transmisión en vivo.
De las visitas, el primer lugar lo ocupan como en otros países 18 dominios de animes que tiene en términos absolutos más de 306 visitas. Los sitios ilegales presentan 104 por ciento más visitas que los sitios legales, y tienen tres veces más usuarios únicos que los legales, con unas cuatro visitas al mes.
En redes sociales, 29 por ciento de los posts analizados llevaron a contenido o servicios ilegales. En este caso IPTV (Televisión por internet) fue el tópico con más resultados ilegales, seguido por las películas y series y en menor proporción los eventos de transmisión en vivo.
Durante la presentación del documento, Marylena Méndez, directora del cet.la, estimó importante el trabajo conjunto y transversal de las organizaciones gubernamentales en el combate a la piratería digital, con regulaciones y mecanismos de verificación que permitan respuestas rápidas ante una violación.
De igual manera, la concientización y formación de capacidades digitales son importantes. “Esto es parte de un conjunto básico de formación, en el sentido de que nuestra vida migra a una vida digital, y ahí también tenemos derechos, obligaciones y responsabilidades”.
En opinión de la especialista, se requiere de cooperación internacional y una regulación inteligente que permita el desarrollo de nuevos modelos de negocio, con ofertas asequibles, ya sea tarjetas de prepago de consumo de contenidos, como algunas alternativas para desplazar el consumo de piratería.
María Carolina Corcione, superintendente delegada para la Protección del Consumidor, recalcó la necesidad de que el usuario no se quede en la indignación, sino que presente denuncia para que la autoridad actúe.
“El que conoce que hay algo ilegal, va a las redes y se indigna, pero no hace nada. Pero ese consumidor que se indigna, pero que no conoce sus derechos, no ha hecho nada al final del día”.
Agustino Fontevecchia, director digital de Editorial Perfil, de Argentina, advirtió que si no hay métodos regulatorios que hagan que las plataformas asuman su responsabilidad, como canal de distribución, entonces no vamos a poder lograr que éstas inviertan dinero en el combate a la piratería. Se necesita reforzar las leyes, para que le den valor a los contenidos en la web, y las plataformas tomen un rol activo en la autocensura del contenido ilegal.
Mauricio Jaramillo, director de la revista de Tecnología Impacto TIC (Colombia), cuestionó que en la región se piense que compartir un contenido pirata es democratizar el acceso a un contenido, porque ayuda a la gente que no tiene cómo pagar, eso es “una excusa que muchos tienen para piratear y no pagar por los contenidos”.
Ygor Valerio, CEO en LtaHub. Partner en Ether City, aseveró que en Latinoamérica los precios han sido más altos, pero hoy ya están muy accesibles, y no se justifica el robo de contenido cuando puede pagar por él. “Si vamos a hablar de precios, el precio del pirata nunca va a ser el precio del legal, por una razón muy sencilla, porque el pirata no tiene costos de producción y desarrollo de contenido, mientras los legales sí”.
C$T-EVP