Compartición de infraestructura, clave para la industria.
El 2020 para la industria de las telecomunicaciones será un año muy especial, no sólo por registrar una de las caídas más profundas en materia de ingresos (en el segundo trimestre cayó a 59 mil millones de pesos) sino porque las condiciones en la demanda registraron cambios relevantes, y en materia de competencia el horizonte se muestra estancado.
Al participar en el foro virtual “Retos de la Competencia en el Entorno Digital 2020”, Gabriel Cejudo, vicepresidente Ejecutivo Comercial en Altán Redes, resaltó cómo debido a la pandemia en el segundo trimestre de este año, la industria de telecomunicaciones registró una de las caídas más importantes -casi 18 por ciento-, de la cual por fortuna en el 3T20 ya hay indicios de recuperación, casi 27 por ciento de crecimiento y se reportaron ingresos por 75 mil millones de pesos.
En el rubro de las líneas en operación, el mercado reporta poco más de 126 millones, cifra relevante pues en términos de regulación es como se mide la participación de mercado y el nivel de preponderancia que guarda Telcel, operador que continúa captando 61 por ciento; Movistar 23 por ciento; AT&T 15 por ciento y un estancado 1.8 por ciento del mercado en manos de los OMV.
“Aunque los OMV han cuadriplicado su penetración de mercado en los últimos cinco años, esa parte sigue siendo ínfima, no obstante los esfuerzos y el buen desempeño que se ha tenido en los últimos cinco años».
Sin embargo, no es lo mismo la captación de líneas que los ingresos, pues mientras Telcel, el Agente Económico Preponderante (AEP) de Telecomunicaciones capta el 61 por ciento de las líneas móviles en operación, sus ingresos representan el 72 por ciento del total del mercado.
AT&T reporta 15 por ciento de líneas, pero sólo capta 19 por ciento de los ingresos totales; Telefónica Movistar con 23 por ciento de las líneas en operación, pero sólo maneja 9.0 por ciento de los ingresos; mientras que los OMV con 1.8 por ciento de las líneas, apenas alcanzan el 0.5 por ciento de los ingresos reportados en México.
Desde hace algunos años se ha discutido en México que la mejor forma de reducir la brecha digital en el país sería disminuir el nivel de inversión de varios jugadores, para que tuvieran la posibilidad de tener un EBITDA sano “sin morir en el camino”, es decir una vertiente que permita aumentar la competitividad en México.
Por ello, la compartición de infraestructura ha estado en el ADN desde la creación de la Red Compartida. En la actualidad Altán Redes ya cuenta con más de 50 clientes como Axtel, izzi, Sky, Walmart, OUI, Megacable, Dish, TUCEL, IUSA, así como 45 socios proveedores como Nokia y Huawei que utilizan la infraestructura de la red mayorista.
“La compartición de infraestructura ayudaría a generar un ahorro hacia todas las empresas, al evitar la construcción de infraestructura en forma duplicada, aceleraría la cobertura de redes y sobre todo se podría desplegar infraestructura donde fuera inviable para un solo operador”, aseguró.
Detalló que al margen de la regulación que es “importantísima”, sería oportuno tener la “madurez” necesaria entre los operadores para definir dónde se debe compartir infraestructura, porque Altán Redes tiene que llegar a muchos lugares donde para algunos jugadores resulta inviable tener presencia, pero que es necesario dar cobertura para disminuir la brecha digital.
«Sería sensato encontrar un modelo de negocio viable para todos» donde haya apoyo mutuo para alcanzar costos inferiores y CAPEX (capital de inversión) inferiores y brindar la mejor oferta al consumidor final, «eso es algo que deberíamos hacer más allá de lo que impongan los reguladores”.
Red Compartida y cobertura social.
Gabriel Cejudo indicó que la operación de la Red Compartida de 2018 a la fecha, creció 111.1 por ciento, al pasar de una cartera de solo 27 clientes a una de 57, todos con contratos firmados, operando y vendiendo servicios, lo que ha propiciado que en el IFT tenga un incremento apreciable de solicitudes para concesión la cual ha pasado de 125 en 2017 a 407 en 2019, lo que habla del interés en este tipo de servicios y de un incremento en la inversión.
En opinión del directivo, la demanda de OMV es creciente en México, para el cuarto trimestre de este año se tendrán lanzamientos muy relevantes, de la magnitud de Walmart e izzi que han revolucionado el mercado con sus modelos de negocio; la cadena de tiendas empezó con seis tiendas; pasó a 33; hoy cuenta con más de 800 y se espera estar en 2 mil 500 para el cierre del año.
La Red Compartida ya tiene cobertura social en más de 40 mil poblaciones con más de 250 habitantes y para el cierre de este año habrá en más de 60 mil de este tipo de zonas en el país, con particular énfasis en escuelas, hospitales, centros de integración con conectividad de alta calidad y precios asequibles, una combinación que las actuales redes no han logrado.
C$T-EVP